Natalia Paris (39), una popular modelo colombiana, intenta explicar a un grupo de personas que se le acercó al salir de una tienda en Bogotá que comer pollo criado con hormonas puede hacer que los hombres se vuelvan homosexuales. En una situación que podría ser una escena de Zoolander , con muy poca capacidad de verbalización articulada y fluida, lo que trata de compensar exagerando la gestualidad, Paris hace evidente la pobreza de sus juicios y una muy escasa inteligencia para discernir qué decir y cómo hacerlo cuando está ante un grupo de desconocidos. "Es sólo una modelo", pensará alguno de los lectores, "no tiene mayor relevancia este hecho". Es cierto, la anécdota vale solo por la metida de pata, a menos que recordemos que hace un tiempo Evo Morales , el pintoresco presidente de Bolivia, dijo la misma estupidez en un foro público. No conozco suficiente a la señora Paris -que en su cuenta de Twitter se autode...
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