Los amarres Con los elementos que aporta esta metodología, lo más probable es que en este punto estemos en condiciones de asegurar las tres características fundamentales –los tres valores- que debe exhibir cualquier estrategia de comunicación integral: sentido, congruencia y consistencia . Sentido se refiere a la necesidad de que cada mensaje de cada actividad de comunicación pueda integrarse a la “narrativa” de la organización prevaleciente entre cada uno de sus distintos públicos-objetivo. Esto significa la posibilidad de integrar lo que me cuenta la organización en la historia que yo me he hecho de la misma, e implica cuidar desde el uso del lenguaje y los símbolos hasta el grado de interés de los mensajes, pasando por una correcta articulación lógica. Congruencia quiere decir absoluto apego al concepto rector y a los mensajes clave, ejecutando las actividades de comunicación de forma suficientemente articulada como para poder garantizar que los diferentes mensajes no solame...
Espacio para informar, reflexionar, dialogar y, en ocasiones, desvariar en torno a la interminable serie de conversaciones que constituyen la esencia de las organizaciones.