- Algunas personas que cuestionaron la reorganización de Intel el año pasado, comentaron que la compañía se había apoyado excesivamente en una firma externa de consutoría, la célebre Bain & Co. de Boston. En ese contexto sucedió que por los recortes de puestos y programas que implicó el apego estricto a las metas propuestas por Bain, a los consultores de esta firma se les aplicó en Intel el sobrenombre de los TaliBain. No sólo en México somos ingeniosos para los motes.
- “En nuestra área estamos muy expensos a vivir claroscuros…”, comentó un ejecutivo de una empresa de seguros al inicio de un curso de comunicación hace unos meses.
- “Yo me acato a lo que me digan” manifestó, con convicción, una compañera de trabajo al preguntársele respecto a su posición en un asunto sobre el que había discrepancias en el equipo.
- Expresión que le acabo de oir a mi colega y buen amigo I.C. (el crédito ante todo): "mi jefe es más absorbente que un kotex".
Hace 2,000 años Séneca, el filósofo romano, explicaba la honestidad a uno de sus discípulos en los siguientes términos: "Éste debe ser nuestro principal empeño: decir lo que sentimos y sentir lo que decimos; que nuestro lenguaje concuerde con nuestra vida. Ha cumplido con su cometido aquel que sigue siendo el mismo cuando lo ves y cuando lo escuchas. Veremos qué cualidades y qué capacidades tiene: pero que sea uno y el mismo. Nuestras palabras no tienen que agradar: tienen que ser de provecho". Casi 20 siglos después estas ideas no sólo siguen siendo vigentes, sino que seguramente resultarán bastante más significativas para muchos, por la grave crisis de valores que vivimos en la sociedad . La credibilidad, el crédito que concedemos a lo dicho por otras personas, es un recurso escaso hoy dia no únicamente para individuos, sino para grupos, empresas, medios de comunicación e incluso gobiernos. No se diga políticos y sus partidos. Ya no le creemos a casi nadie. Y no es un asunt...
Comentarios
Publicar un comentario